Hagamos un breve ejercicio para activar nuestra imaginación. A continuación, leerá una preguntas y usted deberá responderlas imaginando a una persona:
¿Quién hace investigación educativa?, ¿por qué está haciendo investigación educativa?, ¿en qué nivel impactará la investigación educativa? Regresemos al presente.
La persona que usted imaginó, ¿era alguien interno o externo a su comunidad educativa?, ¿era un estudiante, docente, directivo?, ¿era una mujer o un hombre? Las intenciones de su investigación, ¿eran para investigar el rezago educativo en su comunidad? El nivel de impacto, ¿era para transformar su escuela, su comunidad o el sistema educativo? Y, por último, ¿hasta este momento ha buscado en internet qué significa investigación educativa?
Definamos para este artículo a qué nos referimos con investigación educativa. La investigación educativa es entendida como el proceso sistemático, iterativo y objetivo que lidera una persona de la comunidad educativa preocupada por la transformación del proceso de enseñanza-aprendizaje atendiendo una necesidad específica de su comunidad o una necesidad educativa en común con otras. Entender que toda persona interesada en la mejora de la comunidad educativa puede realizar investigación educativa, abre nuestro panorama para apropiarnos del hacer investigativo en nuestro propio contexto educativo. (Collay, M. 2016)
De acuerdo a las necesidades y transformaciones que estamos enfrentando día con día, nos toca asumir la tarea de siempre ir a la par de estos cambios, generando y ejecutando las estrategias necesarias para anticiparnos a los grandes retos que la vida social, cultural y económica trae consigo. Pero sabemos que para poder anticiparnos a dichos desafíos, es de vital importancia primero trazar la ruta que nos lleve a atender lo urgente.
Y aquí quiero proporcionar un ejemplo de lo que vivimos ahora mismo. La Nueva Escuela Mexicana nos ofrece un currículo deliberativo, que esencialmente nos propone ver a cada docente como la pieza clave para la transformación educativa, ya que él será quien haga la conexión y contextualización del currículo educativo para vincular la pertinencia del aprendizaje con las necesidades e intereses de los estudiantes, logrando una conexión entre aprendizaje, escuela y comunidad. Y esta propuesta nos abre, a su vez, una gran oportunidad de atender la necesidad de vincular la vida cotidiana del estudiante a su vida académica para cuidar la permanencia e interés de los estudiantes en su proceso de aprendizaje (García, R., 2019).
Regresemos a nuestra definición de investigación educativa: ¿puede imaginar los beneficios que entrañaría realizarla con miras a potenciar las prácticas educativas ya existentes y desarrollar las que son necesarias para desencadenar en cada comunidad educativa un proceso de mejora continua? Sin duda, generaría un impacto positivo en el proceso de aprendizaje y realización de cada estudiante.
¿Qué habilidades necesitan desarrollar nuestros estudiantes para atender las problemáticas humanitarias del presente y del futuro?, ¿cómo podemos saber lo que necesitamos como docentes, directores, supervisores, asesores técnico-pedagógicos, para desarrollar en cada estudiante estas habilidades?, ¿puede imaginarse a sí mismo liderando y siendo la pieza clave que conduzca a su comunidad educativa a la mejora constante? (Ehlers, D. 2020).
Una propuesta que nos plantea Radix Education para crear capacidad, desarrollar y brindar las herramientas necesarias de liderazgo e investigación educativa en cada persona interesada en la transformación de su comunidad educativa, es la Maestría en Liderazgo y Educación, dirigida a docentes, directivos, supervisores y asesores técnico-pedagógicos, para cumplir el objetivo de instalar en cada comunidad educativa líderes de cambio.
¿Puede imaginar la posibilidad de ser usted la pieza clave para la transformación de su comunidad? La Maestría en Liderazgo y Educación tiene como propósito desarrollar las habilidades de liderazgo, investigación, diseño, implementación y evaluación de proyectos educativos. Es una Maestría completamente en línea, con validez oficial federal antes la Secretaría de Educación Pública, en la cual con una dedicación de 1 hora diaria podrá cubrir todos los contenidos semanales, además de que ofrece becas de hasta el 80% para todos los docentes que la soliciten antes del 31 de julio de 2022.
Sin duda, cada miembro de la comunidad puede realizar investigación educativa. El primer paso es que se interese en descubrir y liderar el camino que conduzca a su comunidad educativa a ser el espacio que responda a las necesidades, intereses y pleno desarrollo de cada estudiante mexicano.
Acerca de la autora
Arandi es experta en desarrollo profesional docente desde la primera infancia hasta el nivel medio superior. Actualmente, es Directora del área de Investigación y Diseño Emergente de Radix Education y Coordinadora Académica de la Maestría en Liderazgo y Educación. Su objetivo profesional es guiar a cada persona del área educativa para que desarrolle las habilidades que serán esenciales para afrontar el futuro.
Referencias:
Collay, M. (2016). Teaching is leading. On Being a Teacher: Readings from Educational Leadership (EL Essentials), 91-96.
García, R., (2019). La investigación Educativa y la Formación de Docentes para una Educación de Calidad. ACTA EDUCATIVA, Vol. 2 Núm. 2
Ehlers, D. (2020). Future Skills. The future of learning and higher education.
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